Hornear sin fructosa y disfrutar sin preocupaciones
Cada vez hay más gente con intolerancia a la fructosa. No toleran la fructosa en absoluto o sólo en pequeñas cantidades. Esto puede complicar las cosas en la cocina. Hornear postres sin fructosa para muchas personas significa tener que prescindir tanto del azúcar doméstico común como de muchos otros edulcorantes alternativos, como la miel o el jarabe de agave. En la mayoría de los casos, los afectados también tienen que prescindir de la fruta y el zumo, así como de ciertas verduras, entre otros. Sin embargo, aquellos que no quieran renunciar a los pasteles, galletas y otros postres, encontrarán buenas alternativas en forma de azúcar de maíz, dextrosa, jarabe de arroz y similares.
Vivir con intolerancia a la fructosa
Las personas con intolerancia a la fructosa deberían emplear principalmente alimentos que contengan solo pequeñas cantidades de sacarosa, fructosa y sorbitol. Especialmente al principio puede ocurrir que no se tolere en absoluto el azúcar normal. Sin embargo, hay muchas recetas alternativas deliciosas, con dextrosa o azúcar de maíz, que facilitan mucho las cosas para convivir con esta intolerancia. Cabe señalar que en caso de intolerancia a la fructosa o de malabsorción de la fructosa es aconsejable evitar el azúcar y aquellos alimentos que contengan fructosa. Puede ponerse en contacto con expertos en nutrición que le podrán dar más consejos útiles.
Información importante para hornear sin fructosa
La fructosa se encuentra en la fruta y en muchas verduras, también en la miel. La concentración de fructosa depende de la variedad y la madurez. Aproximadamente la mitad del contenido de la sacarosa o azúcar común corresponde a la fructosa. El problema de la intolerancia a la fructosa: si la fructosa no se absorbe o se absorbe de forma insuficiente en los intestinos, esto puede provocar diarrea o flatulencia.
Tras una breve fase inicial con alimentos de bajo contenido en fructosa, se puede volver a incluir alimentos con fructosa en la dieta de manera gradual, y también hornear alimentos bajos en fructosa será más fácil. Muchas personas afectadas también han tenido buenas experiencias empleando dextrosa y combinando alimentos que contienen fructosa con grasa y proteína, como la fruta, el quark o el yogur.
Deliciosos consejos para hornear sin fructosa
Sufrir de intolerancia a la fructosa no significa que ya no se pueda preparar pasteles u otros postres. Existen alternativas que permiten el horneado sin fructosa, como por ejemplo el jarabe de arroz. El jarabe de arroz es un verdadero clásico de la repostería sin fructosa y es adecuado para masa pastelera, masa quebrada, pasta choux o masa de levadura. El dulzor depende del gusto personal de cada uno. El jarabe de arroz tiene una dulzura suave y se encuentra en Frusano, por ejemplo.
Otra alternativa es el azúcar de maíz, ideal para productos de repostería, postres o como edulcorante para bebidas. Su bajo contenido de agua de cristalización hace que este tipo de azúcar sea especialmente adecuado para el horneado. En la mayoría de los casos permite sustituir el azúcar granulado en una proporción de 1: 1.
La dextrosa o glucosa es un buen edulcorante para postres, bebidas o productos de repostería. Sin embargo, su poder endulzante es significativamente inferior. Además, la dextrosa contiene hasta un 10% de agua, lo que hace que las masas o postres sean más líquidos; un aspecto que debe tenerse en cuenta al hornear. La dextrosa es, en definitiva, un buen sustituto para la repostería.
Hornear sin lactosa
Existen numerosas alternativas a la leche común para hornear sin lactosa, como la leche sin lactosa, la leche de soja o la leche de cereales como la avena, la espelta o el arroz, pero también la leche de almendras. ¡Pero cuidado con los productos endulzados con azúcar granulado!
Para hornear sin lactosa también debe prestarse atención a los ingredientes de la margarina vegetal, ya que no todas son sin lactosa. El chocolate negro no contiene lactosa. Sin embargo, a menudo se les añade lactosa a las coberturas de chocolate. Los aromas y aditivos alimentarios pueden contener lactosa, por lo que se debería evitar los productos preparados cuando se quiere hornear sin lactosa.
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